domingo, 28 de noviembre de 2010

ALGUNAS CONCLUSIONES

Hasta lo que hemos podido estudiar, podemos realizar algunas conclusiones por las cuales Dios revelo su Nombre personal a Moisés y al pueblo israelita.

  • · El pueblo estaba siendo sometido por el poder egipcio. Necesitaban de un Dios personal, que este a su lado, y fuerte que pueda sacarlos de aquella situación en la que se encontraban.
  • · Podemos coincidir con Dybdahl, al decir que Dios no quería revelar, con el concepto griego de la palabra, su nombre para entrar a indagar sobre su preexistencia o eternidad. Ya que como lo mencionamos arriba, el pueblo necesitaba de un Dios que estuviera a su lado. Como el Dios que “fue”, que “es” y que siempre “será”.
  • · Llegamos a la conclusión de que este nombre es especialmente un nombre personal por el hecho de que al principio del relato del cap. 3, se menciona al “Ángel del Señor”, indudablemente como un personaje directamente ligado a la relación con sus criaturas. Figura que es usada para demostrar la cualidad de Dios como cercano y no distante.
  • · Y por consiguiente, este Dios de relación personal, como bien lo menciona Dybdahl (pp. 58, 59), estimula en sus seres creados e inteligentes, una respuesta de temor, reverencia y adoración.

Hoy en día en la sociedad en la que vivimos, suele olvidarse de ese Dios. Muchos viven ajenos a la realidad de que Dios existe y que está al lado de todo ser humano esperando la respuesta temerosa, reverente de adoración. El nunca dejo de ser, siempre ha sido, y siempre lo será. No debemos olvidar eso. Aunque el mundo con sus quehaceres nos haga parecer que Dios ha desaparecido, al leer éste texto recordaremos que Dios nunca se olvida de sus hijos.

COMENTARIOS AL TEXTO

Ahora expondremos los comentarios que se realizan en relación con este pasaje de las escrituras. Y en cuanto a la interpretación del nombre con cual Dios se presenta. Algo de esto ya lo hemos hecho a lo largo de la investigación, pero es bueno ver con mayor detenimiento lo que algunos piensan acerca de este texto.

Para comenzar manifestaremos lo que dice Jon L. Dybdahl, en su serie de comentarios de la Biblia, llamado La Biblia Amplificada; Éxodo: Dios crea un Pueblo. Él presenta que Éxodo 3 no tiene paralelismos en el AT, y dice que es la declaración única que debería tratarse con oración y meditación. Agrega además que, este capítulo es una ampliación de los últimos versos del cap. 2. Donde se dice que Dios vio, recordó y oyó, y como reconoció personalmente la situación de Israel. Alegado que Dios aquí es intensamente personal, por que ha “descendido” (verso 8). Dios está empeñado en revelarse a sí mismo, porque revela su nombre para ser recordado. Y declara que los versos 13-15 son la culminación de la revelación de Dios. Pues allí es donde Dios mismo declara su nombre después de una seguidilla de discusiones. Señalando además que, Dios no está tratando de hacer una declaración filosófica sobre si, en relación a su preexistencia y eternidad. Tal idea – dice Dybdahl – está basada en las preguntas y presuposiciones griegas abstractas. Tampoco debería interpretarse como una respuesta juguetona por parte de Dios, evasiva, con la idea de que sea enigmática y velada su interpretación. Moisés necesita una respuesta seria, no la respuesta de un Dios juguetón.

Entonces realiza la siguiente explicación sobre el verbo “ser” o también traducido “llegar a ser”. Diciendo que “la forma utilizada (del verbo) es la imperfecta, pero no se comporta como tal. Se refiere a una acción incompleta, no concluida, que se está produciendo. El castellano generalmente traduce un verbo así como tiempo continuo futuro. Por ello es que podría traducirse como Yo Soy, refiriéndose a la existencia y a una acción presente y que continúa en el futuro. También podría traducirse como Yo seré o Yo llegaré a ser, refiriéndose a lo que Dios continuara haciendo por Israel. Ambas traducciones serian correctas”. Terminando entonces con la afirmación de que Dios quiere que se lo conozca como el Dios que está activo a favor de su pueblo y que continuara haciéndolo.[1]

Por su parte el Word Biblical Comentary realiza una interesante propuesta diciendo que debería tomarse a estos verbos en su forma literal, ya que es el mismo Dios el que dice a Moisés “Yo estoy contigo”, y después responde a la pregunta de Moisés “Yo soy el que siempre soy”, y luego le dice que conteste a los hijos de Israel con “Yo soy me envió a vosotros”. Y toma como “inapropiada” la interpretación que se hace del verbo al decir que “era” y que “será”.[2]

El Comentario Bíblico Adventista no realiza ninguna exegesis al texto, solo menciona que esta declaración fue hecha a favor de los israelitas para que no se sintieran desamparados frente a la lucha del éxodo. (Vol. 1; p. 524).



[1] Jon L. Dybdahl, La Biblia Amplificada; Éxodo: Dios crea un pueblo. ACES, Bs As, 1997, pp. 54-58.

[2] David E. Aune. Word Biblical Commentary. Volume 3: Exodus 3:14, Nashville: Thomas Nelson Publishers. 1998, p. 39.

EL NOMBRE CLAVE

hy<+h.a,( rv<åa] hy<ßh.a,(:

hy<ßh.a,(

Este es un verbo Qal imperfecto en primera persona común singular. Que significa “ser”, “estar”, “existir”, etc. En su forma básica aparece 3.540 veces en hebreo bíblico, y todas ellas están en Qal madre a excepción de veintiún de usos del Nifal.

Muy pocas veces en el Antiguo Testamento es hy"h' (h¹yâ) utilizada para denotar simple existencia o la identificación de una cosa o persona. Esto puede ser ilustrado por una mirada rápida a casi cualquier página de la RV en el que se encontrará numerosos ejemplos de palabras tales como "es decir, se fue, fueron," en cursiva, indicando que estos son añadidos por los traductores por amor a la suavidad, pero no en el propio hebreo. En tales casos, el hebreo emplea lo que se conoce como una oración gramatical nominal, que podemos definir más simplemente como un verbo o frase que carecen de una cópula, por ejemplo: Yo (soy) el Señor, tu Dios, el Señor (es) un sol y escudo, la tierra (es) bueno, y en el NT, bendecido (son) los pobres. Esta falta casi total de h¹yâ como una partícula cópula o existencial ha llevado a algunos a utilizar este fenómeno como prueba que confirma que el pensamiento "estático" era ajeno a los Hebreos, sólo último en categorías de pensamiento "dinámico" (ver Boman en la bibliografía más abajo) .

Una forma alternativa en hebreo para expresar la existencia, además de la frase nominal es por las partículas yesh (positivo) ayin (negativo), en realidad otro tipo de frase nominal "quizás" hay "cincuenta justos en la ciudad", "' "no hay Dios." Estas dos palabras son más sustantiva en la naturaleza de lo que son verbales, y en función de que se parecen a los francés il y el gibt es alemán.

Hay casos, sin embargo, donde h¹yâ es usado con un adjetivo predicativo: (a) en la descripción de una situación pasada que ya no existe, "La tierra estaba (hay®tâ) desordenada y vacía" (Génesis 1:2); (b) en la narración histórica, "La serpiente (h¹yâ) astuta, más que todos los animales del campo" (Gen 3:1); (c) en la expresión de una verdad gnómica, "No es bueno que el hombre esté (h§yôt) solo "(Gn 2:18)…

De especial importancia es el uso del verbo h¹yâ en fórmulas de pacto: “yo seré su Dios y ustedes serán mi pueblo” (Jeremías 7:23; Jer 11:4; Jer 24:7; Jer 31:33; etc), y en el contexto de las promesas de Dios de las bendiciones y los juicios, “y haré de ti una nación grande... y serás una bendición” (Génesis 12:2). Un frecuente, aunque quizás engañosa, la traducción de h¹yâ es, como hemos señalado anteriormente, "por venir". Esto puede ser visto en relación con el Espíritu de Dios "viene" a un individuo (Jueces 11:29; 1Sam 19:20), y en aquellos lugares donde la palabra de Dios "vino" a alguien (Gn 15:1; 15:10 1S; 2 Sam 7:4; Jer 36:1).

Se puede decir sobre el significado y la interpretación de Jehová / Yahweh, que parece fuera de toda duda que el nombre contiene el verbo h¹yâ "ser". La pregunta es si es o no este verbo "ser" un Qal, "Él es", o Hiphil, "El hace que," una visión defendida por WF Albright. La objeción más fuerte a esta última interpretación es que se requiere una corrección en la lectura del texto clave en Exo 3:14; "Yo soy el que soy" Lo más probable es que el nombre debe ser traducido algo así como "Yo soy el que es", o "Yo soy el que existe" como se refleja en la LXX ego eimi ho on. El eco de esto se encuentra sin duda en el Nuevo Testamento, Apocalipsis 1:8. Más que cualquier otra cosa tal vez, el "is-ness" de Dios es expresión tanto de su presencia y su existencia. Este concepto puede decirse que no es más importante que el otro.

Bibliografía: Barr, James, The Semantics of Biblical Language, Oxford University Press, 1961, esp. pp. 58-72, in opposition to Boman's emphasis on the "dynamic" versus "existential" character of h¹yâ. Boman, T., Hebrew Thought Compared With Greek, trans. J. L. Moreau, London: SCM, 1960, esp. pp. 38-49. Devaux R., "The Revelation of the Divine Name YHWH," in Proclamation and Presence, eds. J. 1. Durham and J. R. Porter, London: SCM, 1970, pp. 48-75, with citation of the appropriate bibliography of studies on the meaning of the Tetragrammaton. Preuss, H. D., "Ich will mit dir Sein," ZAW 80: 139-73. Schild, E., "On Exodus iii 14: 'I am that I am'," VT 4: 296-302. THAT, I, pp. 477-85. V.P.H.

viernes, 26 de noviembre de 2010

MÁS DE ÉSTA PALABRA

El nombre de YHWH, en general, vocalizado como el Señor, es el gran tema del nombre de la teología del AT. En Éxodo 6:2-3 el Señor indica que no ha hecho revelación especial a los patriarcas por su nombre, Señor. Pero como ese nombre se produce en el Génesis casi 150 veces, muchos han sido inducidos a error a la conclusión de que este bien indica el retraso de las partes del Génesis o una contradicción entre dos tradiciones en el Pentateuco. La solución está en los verbos reflexivos nifal en Exo 6:2-3, también en la llamada Beth Essentiae antes de que El Shaddai, y extiende su fuerza delante de Jehová. El resultado de la afirmación que en el texto dice que Dios "me manifiesta en el carácter de [Beth Essentiae] El Shaddai, pero no en el carácter [Beth Essentiae implícita] Señor, no me di a conocer a ellos." La misma idea está implícita en Exo 3:13 donde el interrogativa "qué", pregunta por el carácter de una persona, mientras que "¿quién?" sólo requiere la identidad.

En algunos pasajes shema Yahvé esta tan inextricablemente ligada a la existencia de Dios, que funciona casi como una aparición del Señor (Ex. 23:20-21; Isaías 30:27). Cf. el tabernáculo del nombre en varios puntos casi como una Cristofanía (Ex. 20:24; Deuteronomio 12:05; 2 Sam 7:13, etc).

El nombre de Dios también significa toda la auto-revelación de Dios en su santidad y verdad (Salmo 22:22 [H 23]). Este nombre puede estar "dentró", es decir, personas de vivan de acuerdo a su enseñanza (Mic 4:5).
[1]



[1] Bibliography: Motyer, J. A., The Revelation of the Divine Name, London: Tyndale, 1956, pp. 3-31. Bietenhard, Hans, "Onoma, " in TDNT, pp. 252-61. THAT, II, pp. 935-62. W.C.K.

jueves, 25 de noviembre de 2010

PALABRAS CLAVES

A continuación haremos una exposición acerca de las palabras claves, que creemos son las más relevantes:

~ve:

Utilizada dos veces en nuestro texto (Ex 3:13-15). La primera vez aparece por expresión de Moisés, al preguntar a Dios el su nombre. En esta forma AmêV.;,(nombre común, sufijo masculino singular, construcción de tercera persona del singular masculino, homónimo 1), traducido como “su nombre”. Acompañado del pronombre interrogativo sin género y numero hm; el cual se traduce como “¿Qué? ¿Cómo? ¿Quién?, etc.”. Aquí en el verso 13, Moisés le pregunta qué les dirá a los israelitas cuando le pregunten cuál es su nombre, el de Dios.

La segunda vez aparece en el verso 15, pero esta vez es Dios quien está hablando. La palabra que aparece es ymiäV, (nombre común, sufijo masculino singular, construcción primera persona del singular masculino, homónimo 1), traducido como “mi nombre”. Y juntamente con el también esta -hz<, (adjetivo masculino singular no estable), el cual se traduce en el texto como “este”.

Este sustantivo es usado unas 864 veces, pero menos de 90 veces en plural. No etimología determinados se ha establecido para esta raíz. Dos conjeturas anteriores son rechazadas: Redslob trató de que se derivan de la shmw raíz "a ser alto" y por lo tanto "monumento" (Gen 11:04), la" excelencia "o" majestad” (Sal. 54:1), mientras que otros lo han considerado como una forma abreviada de Shema. Pero el argumento presentado por WR Smith es el más preferido hoy. Se deriva msh de la raíz completa árabe que significa "a la marca o marca", por lo tanto, un signo distintivo externo para diferenciar una cosa o persona de otra.

El concepto de nombres de persona en el Antiguo Testamento a menudo se incluye la existencia, el carácter y la reputación (1Samuel 25:25). Frecuentemente, la forma plural de shem es traducido como "personas" (por ejemplo, Num. 1:2, 18, 20, Num. 3:40, 43; Num. 26:55). Adicional "para cortar el nombre de" era igual a la liquidación de la misma persona (Deut. 7:24; Deut 9:14; 1Sam 24:21 [H 22], etc.) El nombre elegido para un niño es a menudo describía los deseos de los padres o las expectativas de la personalidad al madurar. Esto es particularmente evidente en el proceso de cambio de nombre, por ejemplo, Jacob convirtiéndose en Israel (Génesis 35:10).[1]

En la siguiente entrada, seguiremos aportando más información sobre esta palabra y otras más.



[1] Harris, Laird et.al. Theological Wordbook of the OT. Vol. II. Chicago: Moody Press, 1980.

miércoles, 24 de noviembre de 2010

CONTEXTO LITERARIO DE ÉXODO


Hablando del contexto literario del libro, el Éxodo para los hebreos era considerado una parte de la unidad llamada “Torah”. Esta significa “ley” o “instrucción”. Los cristianos hoy lo llamamos Pentateuco, que significa “obra/libro en cinco partes”. Proveniente del griego pente=cinco, y téukhos=caja, haciendo referencia al lugar donde eran guardados los royos. Esto nos hace ver que no se puede separar a Éxodo del Pentateuco.

Al ser la Torah la parte más importante de todas las Escrituras hebreas, el Éxodo cobra un sentido mayor de importancia para el estudio, la comprensión y la meditación.

Por consiguiente, con el resto de la Biblia posee un vínculo importante. Es citado un sin número de veces por los autores bíblicos. Y más, no posee casi paralelos, aun cuando fuera usado por los demás escritores de la Biblia. Hay por lo menos unas 149 referencias o alusiones al Éxodo en el Nuevo Testamento. Y no solo citados sino que los temas y el vocabulario del Éxodo son usados son intensidad. En el Antiguo testamento los que más utilizan al Éxodo son los Salmos e Isaías, por ser libros más extensos y por la temática que abordan en ellos.[1] Y principalmente, es usado como modelo literario para el Apocalipsis, donde se produce la revelación de Dios mas grande de las escrituras, y la liberación definitiva de los “hijos de Dios”.[2]


[1] http://es.wikipedia.org/wiki/%C3%89xodo; Jon L. Dybdahl, La Biblia Amplificada; Éxodo: Dios crea un pueblo. ACES, Bs As, 1997, pp. 16, 17.

[2] Apuntes del Doctor/Profesor Carmelo Martínes, Cátedra de Apocalipsis.

jueves, 11 de noviembre de 2010

CONTEXTO HISTÓRICO DEL ÉXODO

En esta ocasión haremos una breve descripción del marco histórico en el que se encuentra el libro de Éxodo. Por el cual debemos comenzar desde el principio. Es así que empezaremos por Génesis, pues allí termina la historia de José y Jacob, entrando en Egipto. Habiendo José quedado como segundo en el reino, después de faraón (siendo esclavo y preso), tras la predicción de los 7 años de abundancia y buena cosecha, con los 7 de escases y cosechas malas. Al llegar sus hermanos a Egipto en busca de alimento para ellos y su familia, José los pone a prueba. Dado un tiempo se revela como su hermano perdido y vendido como esclavo. Los hace traer a la tierra de Gocen, donde tiene la oportunidad de desarrollarse como pastores, sin molestar a los egipcios.
Dado un buen tiempo, la familia crece y se forma el pueblo de Israel. Y el faraón ve que este pueblo puede ser una amenaza contra él, y decide subyugarlos a realizar el trabajo de esclavos. Es aquí donde se realiza la matanza de niños varones recién nacidos. De los cuales, sólo Moisés sobrevive a semejante masacre.Y por consiguiente, nuestro texto está ubicado en el principio del desenlace de la salida de Israel de Egipto. En el llamado de Dios a Moisés, hijo de los hebreos, de la tribu de Leví; rescatado de las aguas del Nilo por la hija de faraón. Criado y educado en las escuelas de Egipto, como príncipe del reino. Fugitivo por asesinar a un hombre que maltrataba a un esclavo israelita. Errante en la tierra de Madián. Casado con la hija de Jetro, Séfora. Paso allí 40 años hasta recibir la visión de Dios de ser el elegido para sacar a Israel de la opresión de Egipto.El Comentarios Bíblico Adventista dice que el periodo de la entrada de Jacob a Egipto coincide con el reinado de los Hicsos. Oriundos de la zona de Siria y Palestina, por lo tanto eran semitas. Mercaderes, odiados por los egipcios autóctonos. Su reinado duro unos 150 años (c. 1730-1580 AC). Después fueron expulsados por Sekenenre, un príncipe que se sublevó al reinado hicso. Perteneciente al Alto Egipto. No obtuvo mucho resultado su batalla con ellos. Karmosis y Amosis, los cuales eran hermanos, realizaron campañas contra los hicsos expulsándolos definitivamente del país.
Posteriormente menciona que Amosis fue sucedido por Amenhotep I, el cual dio el reino a su hijo Tutmosis I (1525-1508 AC), y este a Tutmosis II (1508-1504 AC), reinando poco tiempo. Este fue sucedido por una mujer Hatshepsut, una hija de Tutmosis I, gobernó pacíficamente a Egipto durante 22 años (1504- 1482 AC). Posteriormente fue sucedida por Tutmosis III (1492-1450 a.C.), el cual dio a su hijo Amenhotep II (1450-1425 AC). Este parece ser el faraón del Éxodo, ya que no fue sucedido por el heredero, sino por su segundo hijo, Tutmosis IV (1425-1412 AC). Esto parece ser por la mortandad de los primogénitos de Egipto.Otros sin embargo, datan el relato del éxodo en la primera mitad del siglo XIII a.C., entre los años 1300 y 1250. Esto haría que el faraón de la opresión fuera Setí I (1305-1290) y el faraón del Éxodo, Ramsés II (1290-1224).
Aunque no sepamos con exactitud el periodo exacto de los acontecimientos del relato del Éxodo, en lo que podemos estar seguros es en la veracidad histórica de tal evento. Ya que existen muchas evidencias arqueológicas que lo confirman. Como las cartas de los cananeos a Egipto pidiendo ayuda por invasiones de un pueblo armado. El relato del Éxodo es indudablemente histórico.